Aquellas metáforas que recorren toda la narración como un hilo conductor:
“La vida laboral es una carrera”, por eso se habla de “carrera profesional”. La carrera tiene etapas, con dificultades en algunos momentos difíciles, se pasan sufrimientos y dificultades, hay paradas y triunfos, sobre todo hay esfuerzo... Hay satisfacciones de las metas conseguidas. Hay aspiraciones y sueños cuando aun no se ha conseguido. Hay paciencia por el triunfo o ansiedad por la meta. Puede ser un maratón o una carrera de obstáculos o una carera de 100metos, o una carrera en solitario por una montaña, de veredas estrechas y de paisajes, que visionas espectaculares, como este capítulo que escribo. De una metáfora general después se pueden ir sacando otras muchas metáforas secundarias.
“ La vida laboral es como un camino” por donde uno va mas rápido o lento, donde tiene subidas y bajadas , donde hay posadas o no hay descanso donde tiene compañeros de camino o es un camino solitario, como “el corredor de fondo” . Este camino puede ser como una “autopista” rápida, firme, con suelo forme y de calidad, también puede ser una carretera llena de altibajos...El acierto depende de la elección de la metáfora que mejor describa la situación.
“La vida laboral es como un partido de futbol, cada uno juega su partido, Hay contrarios y uno juega en una posición, yo era como el portero porque estaba en riesgos, yo era como el delantero que tenía que meter los goles con el cliente pero no me llegaban balones.
“La vida laboral es un recipiente que voy llenando”. He tenido una vida laboral plena. Estoy llenando la vida laboral con mi esfuerzo y mi formación... La vida laboral está vacía o está llena o se está llenando. La vida tuvo grandes oportunidades.
“La vida laboral es un edificio que se va construyendo”. Poner sólidos cimientos con la formación. Profundizar los cimientos con los valores adquiridos. Instalar en su interior. Levantar pisos que se amueblan con emociones y razonamientos. Quiero construir el interior de este edificio, adornar su interior con retos....
“La vida es un juego de azar”, por ejemplo, no sería aconsejable porque da muy poco juego a la propia gestión, salvo que se utilice en un momento determinado para decir algo parecido a “entrar en aquella empresa es como si me tacara la lotería, después pude desarrollar, invertir en mi futuro todas las oportunidades que se me ofrecieron”. O comentar aquello tan socorrido de que la suerte echa las cartas y cada uno la juega después.
“La vida es un rio” que te arrastra. Es un aullido “la vida ya te empuja como un aullido interminable” (Goytisolo) Bajar por el río lleno de rápidos...O avanzar por ríos tranquilos. “Avanzaba de espalda aquel rio...”. El rio lleno de trampas y remolinos. El rio que permite disfrutar de la orilla. El rio infectado de alimañas, el rio maloliente, el rio de la vida que aporta el agua.
El tiempo, los momentos, el paso de la vida. Lágrimas en la lluvia, “Yo he visto cosas que vosotros no creeríais: atacar naves en llamas más allá de Orión. He visto Rayos-C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tannhäuser. Todos esos momentos se perderán en el tiempo como lágrimas en la lluvia. Es hora de morir”. “ Blade Runner.