No todas las empresas consiguen sobrevivir a los impactos del entorno, no a todas les da tiempo a reponerse de determinados envites o tiene recursos contrastados para tales momentos.
Los diarios económicos y periódicos nacionales e internacionales están llenos de noticias que aluden a ajustes de plantillas, de diversificación de negocios, de fusiones, de adquisiciones, de alianzas hasta ayer impensables. Las empresas, como proyectos de generación de valor económico y social sufren o reaccionan a esas fuertes influencias. Las empresas tienen vida y ahora la vida de las empresas, en este entorno, es mucho más corta que hace dos décadas. La esperanza de vida de las organizaciones se acorta. Las expectativas de una trayectoria profesional estable en una empresa se esfuma en el pasado y los profesionales tienen que trazar su propia carrera profesional, de forma paralela, a la de la empresa.
Los efectos del entorno y de la globalización en el sistema productivo y de servicio, en las empresas y Organizaciones, está provocando la desaparición de muchos puestos de trabajo y profesiones con la convicción de que algunos de ellos y muchas de ellas desaparecerán para siempre. Todas aquellas actividades profesionales cuyas respuesta sean previsibles las terminará haciendo un ordenador o un robot mejor que nosotros.
Todas aquellas actividades no previsibles o relacionales se mantendrán de forma cada vez mas cualificadas.
Este entorno y este ambiente empresarial está provocando una necesidad de cambio, de transformación de los empleados ya que se tiene la certeza estadística de que a lo largo de la vida profesional va a tener que buscar empleo en varias ocasiones o literalmente “ reinventarse” en algunas de ellas, apostando por nuevas actividades profesionales o nuevos ámbitos productivos.
A continuación se muestra un cuadro que recoge algunos de estos impactos del entorno en las emporsasy las consecuencias generales de los mismos: